En el quinto piso del Palacio de Hacienda son contundentes. “Esta vez, no vamos a tambalear”, afirman. El descalabro global en los mercados financieros y el comercio que generó la nueva política arancelaria del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, no va a incidir -aseguran- en el tramo final de la negociación que lleva adelante el país con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para conseguir dólares frescos que sirvan para capitalizar el Banco Central (BCRA).